Las Prácticas de Campo

Así como la formación del estudiante de medicina requiere del aprendizaje en el hospital, el estudiante de ciencias de la tierra no debería prescindir de la experiencia del trabajo de campo en su formación.

Es allí donde entra en contacto con la realidad y donde se enfrenta por primera vez a la paradoja de encontrar, a la vez, demasiada y muy poca información.

Los estudiantes deben no sólo adquirir información teórica sobre las ciencias de la tierra, sino que, deben incorporar actitudes y desarrollar habilidades propias del trabajo en el campo, en el criterio de la logística y en el manejo de la instrumentación.

Con las prácticas de campo se tiene como objetivo que los estudiantes despierten el interés en descubrir la gran cantidad de información que está disponible en un escenario natural, además de incentivar a que compilen, sistematicen, analicen e interpreten la información, para proponer modelos que expliquen los procesos geológicos y los fenómenos geofísicos de manera lógica, de tal manera que los puedan relacionar para una interpretación lo más acorde a la realidad.

En tu época de estudiante y sales de viaje con tu familia y/o amigos a algún sitio en donde hay paisajes geológicos muy bonitos (como parte del paisaje, como un sitio de recreo y/o esparcimiento, cortes de carretera, etc.) te preguntan acerca de la historia geológica y les da una explicación, tal vez una explicación geofísica o geomorfológica o hidrogeológica o de tu carrera y más allá de lo que en realidad te comprenderían y les explicas como puedes, y ese es el momento valoras la importancia que tienen las prácticas de campo, porque realmente ni en las prácticas no sabes de la dificultad y responsabilidad que conllevará hacer un trabajo profesional, porque incluso en las mismas siempre hay a quien no y a quien sí le importa.

Cuando nos vamos de prácticas nuestros padres reúnen el dinero necesario para poder realizar las mismas, así no tengan pero lo consiguen y piensan que nos matamos la cabeza estudiando y haciendo experimentos o investigaciones casi imposibles o que caminamos mucho sin comer, con hambre y sed o que nos queremos comer al mundo estudiando al estar lejos de casa pensando que hasta en las noches estamos estudiando sin dormir en el hotel y sedientos, hambrientos y desvelados vamos al campo todos esos días fuera de casa y lejos de la ciudad o de zonas urbanas en lugares inhóspitos, aunque bueno eso creerán nuestros padres que tienen una profesión distinta a la ciencias de la tierra.

Una cosa es cómo nos ven nuestros padres, cómo nos ven los demás, cómo piensas que te ves tú, cómo te ven tus profesores, cómo te ven las empresas, cómo te ven tus amigos.

No puede faltar el que se siente experto o súper científico o el sabelotodo, ya sea porque ya conoce la zona de estudio o porque ha leído algo o porque está repitiendo el curso o porque alguien que ya hizo la práctica le comentó la historia geológica o la interpretación geofísica/geológica, sabiendo a qué se enfrentará, ya sea para un mapeo geológico o para un método geofísico, o en identificar las formaciones, el tipo de ruido que provocarán las rocas superficiales para aplicar un método geofísico, para ver qué electrodos lleva o el sitio indicado para dejar una base magnética o ver la logística para las bases gravimétricas.

A quien le interesa demasiado la práctica porque piensa que es de su área de interés y que por lo tanto será su vocación, que porque es para su futuro y se la pasa anotando absolutamente todo, incluso hasta la hora en que el profesor va a orinar o si el profesor fue a defecar o buscando algún error del profesor.

De manera similar, siempre existe el ñoño, el matado o el chancón, que no deja ni siquiera ir a orinar al profesor porque se la pasa preguntándole, y que lleva hasta libros, copias, equipo innecesario, apuntes, varias libretas, etc., no sólo en su mochila de viaje, sino hasta en la mochila de campo.

Además siempre hay quién también lleva copias, libros y piensa que en campo resolverá todas sus dudas, piensa que leerá sus libros y copias (artículos) en el campo, al enfrentarse a un afloramiento o para operar algún equipo, para un arreglo, logística, etc.

Las salidas a las prácticas siempre tienen una historia, que no siempre es la misma, pero siempre hay situaciones muy clásicas que pasan. Así como hay estudiantes entusiasmados por una práctica, también hay a quienes no les interesa el curso y solo esperan la práctica pero no para aprender sino para ligar, tener relaciones, pistear, enamorar, viajar y relajarse, juerguear, etc.

El primer día del viaje de práctica, todos contentos, con todos los ánimos, aceptando cualquier reto en campo, con mucha curiosidad y ansiosos de llegar a la zona de estudio en donde se realizará la práctica, pero la mayoría esperando llegar al hotel y alojarse para después organizar la primera salida nocturna, o bien, para llegar a acampar y compartir con los amigos en la primera noche.

Desde el primer día, algunos que no se conocen, comienzan a conocerse, porque a veces en una práctica van grupos de otras carreras que llevan la misma materia (petroleros, mineros, civiles), y poco a poco todo el mundo va agarrando confianza o se nota quien se aísla todo el tiempo.

En tus tiempos de estudiante, generalmente tienes recursos limitados, y aunque no sea así, para economizar para las chelas, es común, que cuando llegas a alojarte u hospedarte, alquilas una habitación para 4 personas y se quedan 15 o no falta el que alquila una habitación para quedarse con su pareja (de prácticas o compañera de escuela o novia (o) el/la que la alcanza a su pareja al pueblo o ciudad porque piensa que le pueden pedalear la bicicleta o para aprovechar para pasar la noche juntos).

Es bien sabido que los estudiantes de ciencias de la tierra son buenos catadores de cerveza, de vino, de tequila, etc., o en pocas palabras, son buenos consumidores de alcohol. Pero si es así, todo comienza por el ambiente de estas disciplinas tan maravillosas y principalmente en las prácticas de campo.

Por ejemplo los alumnos de las escuelas de ingeniería tienen fama de borrachos, a los que se les conoce como ingeniebrios, sin importar la carrera que sea. ¿Los estudiantes de ciencias de la tierra que provienen de la facultad de ingeniería son más borrachos que los que provienen de la facultad de ciencias o de alguna otra facultad?

En una práctica, al siguiente día y después de una noche de juerga, de cervezas o salidas nocturnas, no falta el que amanece con resaca o desvelado, que llega tarde para salir al campo, y que durante el trabajo de campo anda buscando la sombra y que no quiere saber nada de nada ni de nadie y que anda buscando una tienda todo el tiempo para comprar algo para la resaca para poder recuperarse.

No está mal salir durante los viajes de prácticas de campo, pero ¿es necesario llegar a esto? Esto sin importar si te interesa o no una práctica.

En un viaje de prácticas, ¿existe quién realmente no sale por las noches a juerguear, o en las noches realmente se trabaja en gabinete? En este sentido no falta el que realmente sólo va a cenar y se regresa al hotel, que el mismo que se compró una pica para la práctica, a diferencia del que se compró un tequila para la misma.

Tampoco pueden faltar los alumnos de universidades de grandes urbes, que al salir en los pueblos pequeños, se sienten gringos, sintiendo que han llegado a un país tercermundista, que en su momento nunca puede faltar quién les haga ver su realidad.

Respecto a las salidas nocturnas, no falta el que organiza las mismas, quien desde antes de salir a la práctica ya averigua desde antes en donde están las discotecas y los bares del lugar en donde se quedaran todos, buscando incluso un hotel estratégico para lo mismo.

No falta el enamorador, o bien el galán, fortachón y que solo espera la oportunidad y esperando a quien caza o quien lo caza. No se puede quedar de lado el que se cree guapo o guapa pero que es sexy y cree que todo mundo quiere tener relaciones sexuales con él (ella), o bien, no falta el guapo o la guapa al que todos buscan para compartir asiento en el bus o incluso la misma habitación de hotel.

En las prácticas no todo es trabajo siempre, porque también las prácticas sirven para reflexionar, pensar e incluso para relajarse, sin embargo, hay quienes se relajan excesivamente, porque no quieren caminar y buscan el mayor ocio posible, o bien, evitar la fatiga.

De estos casos, hay quién para no caminar y/o cargar, busca operar el equipo de medición, o hay quienes hacen mapeo geológico, geomorfológico, geotécnico, etc. desde la camioneta o el carro de prácticas, hay a quienes les da flojera tomar rumbo y echado y no se dan cuenta la importancia de estos datos a la hora de hacer su informe final o como datos de referencia complementaria para otro tipo de estudios inclusive geofísicos y qué decir de quienes desde el autobús escolar de campo o desde la camioneta quieren mapear o interpretar o deducir los afloramientos o las rocas de los mismos.

Cuando el trabajo de campo es en grupo nunca falta el que no hace nada, o el que hace todo, o el que no sabe nada pero le echa ganas, el que sabe y no hace nada, etc. No falta el que quiere controlar u operar el equipo de campo, los instrumentos o todo lo que tenga que ver con tecnología que en realidad no está mal, pero que no deja darle oportunidad a los demás y también siempre está el que no quiere saber nada de instrumentación, que en realidad es porque no sabe y ni conoce el o los métodos. Pero por otro lado, no falta el organizador, el que en las prácticas quiere mandar a su brigada pero que no hace nada.

No falta el que se desaparece, porque quiere explorar sólo, o porque no sabe ni madres o porque se va a fumar algún tipo de tabaco o porque es de los que está con resaca, o el que se separa del grupo para buscar rocas o minerales preciosos y se pierde, luego el grupo lo anda buscando. No falta el que todo el tiempo cuida la flora y la fauna, que no quiere que ni mates una mosca, o una hormiga, etc.

No puede faltar el que no sabe nada (ni mierda), así como el que no se calla, que de hecho no sabe nada del tema pero no se calla, porque habla hasta por los codos, el que cree que lo sabe todo y que se chorea (florea) a todo el mundo, dice lo que no sabe y lo que no sabe se lo inventa, creyéndose el futuro súper científico y se la fuma divagando su historia geológica o interpretación geofísica o teórica, o el que se cree político y el que no se quiere dejar de nada ni nadie y qué opina que en el futuro ni de chiste trabajará por ejemplo en el petróleo o en la minería, etc., por mil razones de las que habla cada vez que se acuerda.

No falta el que no habla ni madres pero que sabe del tema o de la práctica en cuestión y que de hecho domina el tema y comprende muy bien lo que sucede o pasó en la zona de estudio por las problemáticas del trabajo de campo.

Del que no sabe ni mierda, resulta que durante una práctica, es el que se convierte en el esclavo, el que todo el tiempo está detrás del que sabe y que por lo tanto se ofrece a llevar sus cosas, a hacer sus anotaciones, que pregunta cosas tontas y que hasta pide permiso para ir al baño, para que el que sabe no continúe sin él.

Y qué decir, del que sigue al profesor a todas partes, que incluso no lo deja ni orinar o hacer sus necesidades básicas y está todo el tiempo preguntando lo que el profesor ya explico y trae consigo libros pesados, apuntes, copias, y equipo que ni sabe usar en su mochila.

Es bien sabido que el conocimiento no es lo mismo que la inteligencia, y no falta el que no ha ido ni a clases pero que sabe y comprende más que los que si van a clase, o el que llega sabiendo todo en la teoría, pero está súper perdido en el campo y no falta el que en el campo se adapta y se le facilita todo.

Durante el desarrollo de las prácticas, independientemente si alguien va o no con resaca después de la primera salida nocturna, durante el trabajo de campo, no puede faltar el que busca la tiendita ¿para refrescarse? con una chela, sin importar si trae o no trae dinero (lana, varo, plata, billete) para comer, o tampoco puede faltar un gordito que solo busca comer en todos lados y busca la tienditas, o no falta el sano y que guarda la línea y que en el primer día solo quiere tomar agua y comida ligera y al terminarla busca la tienditas para comprar algo ligero y más agua, pero ¿esto siempre es real? En las prácticas a todos los que son sanos se les quita, en lugar de agua buscan una coca cola o una chela bien helada, aunque tampoco falta la chica que no quiere tomar agua ni nada por no tener que ir al baño en el campo.

No falta el que no lleva nada para el desarrollo o para apoyarse en la práctica, pero no porque sea vale madre o porque no le importe la práctica, sino porque no cuenta con los recursos económicos para ellos, pero que entiende más de quien lleva su propio equipo (pica, brújula, GPS, chaleco, escuadras, distanciometro, reloj de alpinista con altímetro, libreta resistente al agua, bebedor térmico, botas y mochila de marca, etc.).

Por otro lado, no falta el que no lleva ni madres y no porque no tenga los recursos sino porque simplemente no le interesa o simplemente es un vale madres. Incluso, del que tiene varo, no falta el que se va a la práctica en su propio auto, y que se separa del grupo, buscando el mejor hotel y que sale con su grupito selecto en las noches, buscando el mejor lugar y tampoco falta quien le sigue por algún tipo de interés.

No falta el que no lleva lana o dice que no lleva y se la pasa de conchudo o de gorrón todo el tiempo, y cada vez que se hace la vaca para las chelas y en las reuniones es común que llegue sin llevar nada y esperando a que le inviten.

No falta el que piensa que lo que se vea en esa práctica no le va a servir de nada y para todo el tiempo con una actitud pesimista todo el tiempo (pero no al tratarse de las salidas nocturnas), ya sea porque piensa que pertenece a una carrera ajena a esa práctica y piensa que lleva el curso como relleno. Por otro lado, siempre hay a quien no le interesa ninguna práctica porque piensa que se dedicará a ser programador, modelador o procesador de datos (geofísicos/geológicos), o bien, piensa que tendrá su empresa y no será obreros o empleados de empresas, pero ese es un pensamiento de emprendedor?

O también, el que piensa que no es necesario esforzarse porque ya tiene un trabajo seguro, ya sea porque su papá le dejará o conseguirá una plaza en la industria petrolera o minera o porque un familiar tiene una empresa. Muchos alumnos se quejan de que una práctica no sirve y otros piensan que ahí se ve quien si tiene vocación para un área, pero ¿si no hubiera prácticas como podrías evaluar a un alumno, por ejemplo en geología de campo?

A veces en una práctica conoces a tus mejores amigos o te das cuenta quien es tu mejor o mejores amigos, se descubre o se ve quien realmente es el mejor, porque hay quienes demuestran ser los mejores en la teoría o la aplicación computacional en los salones o aulas de clase, pero en la práctica todo es distinto, ahí realmente se ve quién será el bueno en el campo. En un semestre o durante toda la carrera en las aulas de clase conoces a muchos con los que te llevas bien, pero en una práctica de campo podrías conocer al que será tu amigo de toda la vida.

No puede faltar el que se quiere acabar el alcohol cada día, el que no para de hablar, el que no habla, el inoportuno, el envidioso, el buena gente, el humilde, el rico, el honesto, el ambientalista, el sabelotodo, el ignorante, el que pone apodos, que en cada práctica podría alguien ponerte el apodo de toda tu carrera como estudiante e incluso de toda la vida con tus amigos; tampoco falta el machito que quiere golpear al que se le ponga enfrente, no falta el mecánico, el inventor, el que sabe de electrónica, el que para con el celular todo el tiempo, el que sabe de tecnología, el que propone y no hace nada, el que saca de apuros a todos, el que sabe más que el profesor, el que está perdido en todo momento, el que ya llevó el curso más de dos veces y está recursando, e incluso no falta del que hablan todo el tiempo porque faltó porque tuvo que quedarse a cuidar a su bebé o porque tuvo que trabajar, el que lleva su guitarra a pasear porque bebe en lugar de tocar, etc.

En la última noche de la práctica, cuando la mayoría se conoce, la salida en grupo es más amena y es el último reventón, el mejor, en donde hay trago a morir y en donde se perdió el respeto y en donde hay más confianza hasta del más tímido (a), y no falta una chela el último día en gabinete, procesando datos, digitalizando mapas o escribiendo el informe final. Y finalmente, en el último día, el día del viaje de regreso, suele pasar que la mayoría ya desean irse a casa, ya sea por cansancio de tanto trabajo de campo o gabinete o por tomar tanto alcohol desde el primer día de prácticas y por la resaca, o cruda moral, etc., aunque hay quienes quisieran quedarse más tiempo por la diversión o por alguna razón ajena al curso de la práctica.

Mucho de esto se aplica en muchas ocasiones al profesor, no sólo a los alumnos, y refleja de cómo era el profesor en sus tiempos de estudiante. No se pueden dejar de lado, a los profesores que también les vale madre todo, que solo van a la práctica por obligación y enseñan lo menos que pueda y que solo comentan lo más básico y sin detallar y sin criterios, problemas ingenieriles, etc., y sin incentivar a sus alumnos a preguntarse lo que ha pasado o como resolver un problema, es decir, sin importarle si los alumnos aprenden o no.

Cabe resaltar que también hay profesores con complejos por el hecho de no haber conseguido el trabajo perfecto y tienen la mentalidad de que como a ellos les costó mucho llegar a donde están, no enseñan todo a sus alumnos, sino sólo lo mínimo, sin siquiera llegar a lo necesario, pensando que el alumno tiene que investigar y matarse estudiando, y esperando que nadie llegue más lejos que él o que consiga el trabajo que él no consiguió y por eso mismo, su intención es precisamente no enseñar todo o lo mínimo.

Desafortunadamente en las universidades de los países latinoamericanos no existen los recursos necesarios para realizar prácticas fuera del país, por ejemplo para quienes viven en bajas latitudes ir a hacer una práctica a medianas o altas latitudes para ver el comportamiento de la respuesta magnética de los materiales o hacer una práctica en distintos yacimientos debido a que no funcionan siempre o en lugares en donde se enfrenten a problemas de inyección de corriente o ver la diferencia de hacer trabajos en las alturas que a nivel del mar y no sólo por la condición física sino también por logística y para valorar lo que se tiene y comprender que si no existe la buena organización y conocimientos no funcionan las cosas, lugares en donde no hay depósitos petroleros, diferentes yacimientos para exploración de oro, etc. A veces los estudiantes no consiguen prácticas profesionales por la falta de organización y de intereses de quienes se supone son los vinculadores en sus universidades con la industria privada o con otras instituciones gubernamentales, incluso de las mejores escuelas, y suele pasar que los vinculadores de las universidades más pequeñas están mejor organizados.

Hay estudiantes que no saben valorar entre otras cosas, que no siempre hay presupuesto para las prácticas y tampoco se dan cuenta de que en algún momento de su vida profesional les serán útiles así no piensen dedicarse al área/curso de la práctica en cuestión, y esto, sin mencionar, de que en algún momento de sus vidas extrañaran la vida universitaria (incluyendo las prácticas), además, porque cuando se presente un trabajo de verdad, ya no habrá un profesor a quien preguntarle, o no habrá opción de esconderte o relajarte.

El no tener prácticas de campo, es como ir a un restaurante, leer la carta y que se te quite el hambre. Las prácticas de campo son muy necesarias en la formación del estudiante de alguna de las ramas de las ciencias de la Tierra. Las ciencias de la tierra comienzan en el campo, en donde se obtienen los datos, los cuales deben de ser de la mejor calidad.

Como lo menciona Robert Kiyosaki, hay cursos que en tu vida jamás volverás a ver y que no te servirán de nada, y para los alumnos que siempre preguntan lo mismo: ‘¿Para qué quiero estudiar esta materia si no voy a trabajar en esto?’ La vida no tiene nada que ver con la burbuja utópica en la que nos envolvemos durante todos NUESTROS estudios. La vida no te espera, no te comprende y no te hace recuperaciones…” Aunque no te interese una práctica porque piensas que no te dedicaras a un área, y durante la misma no haces nada y ni participas y dejas que tus compañeros hagan todo por ti, piénsalo dos veces, porque no siempre se tiene el trabajo deseado y te podría pasar, por necesidad, que tengas que dedicarte a dicha área.

Y tú eres de los que no dejan trabajar al profesor o de los que les vale madre la práctica, o eres el esclavo, o el humilde o el guapo o el inteligente, etc.?